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Kinderham 511

Azzarello, que grande eres ...

Azzarello, que grande eres ...

He tardado casi un año en pillarle el punto al Superman de Azzarello y Lee. La verdad es que partía con unos antecedentes muy malos. Su saga “Batman, El Peor Detective del Mundo” dolía. Daban ganas de ir a su casa y de gritarle algo como “¿Que te ha hecho Batman para que lo trates así?”. Así que cogí su Superman esperando lo peor. Un comic horrible aunque bien dibujado (a mi me gusta Lee). Algo que animara mis gritos de “¿Por qué dais superhéroes a este tío?”. Y bueno, al principio eso encontré.

Desvaríos metafísicos, Supes hablando con un cura, todo el mundo mirando al horizonte con cara de preocupación ... El momento culminante de sus 3 primeros tebeos es el cura tirando unos melocotones al suelo. Las otras colecciones que incluye el tomo de supes me gustaban (sobre todo la de Austen) así que seguía comprándolo. Pero eso no explica porque seguía leyéndolo. La verdad es que ya me había enganchado, pero aun no lo sabía.

Mi problema era de enfoque. Yo quería leer un buen tebeo. O al menos uno lo bastante bien hecho como para ser entretenido. Y este no lo conseguía. De hecho estaba a mucha distancia de ese limite. Así que no podía decir nada bueno de el. ¿Verdad? Mentira.

Hay gente que ve pelis de Ed Wood, o cosas como Cabeza de Familia. O cantantes que se hacen famosos por lo mal que cantan y gracias a ello labran una carrera. Este tebeo entra en esa categoría. Es del tipo “tan malo que es bueno”. Además lo hace con estilo. No es como esos tíos modernos que hacen cine cutre a propósito para que sea Trash. No, Azzarello intenta hacer la puta obra maestra definitiva de Superma. Y en vez de eso crea un engendro adorablemente penoso. Con números tan geniales (aviso, lo que sigue es literal) como ese en el que los 4 elementos se enfadan con Superman por ser extraterrestre. Con Superman diciendo que puede curar el cáncer, pero que sería un agobio. Con el cura mandarino como una amenaza cada vez más cercana.

La cosa está llegando a unos niveles majestuosos. Solo espero que Brian haga una concesión a los aficionados y saque a Zod diciendo eso de “Arrodillate ante mi, hijo de Jor-El”.

2 comentarios

torpin -

nada sigue sin convencerme el hombre de acero mantecado. Por cierto cuando me dejas más de flash que me has dejado con el mono

tebeonauta -

Joder, tienes razón. Es un cómic tan raro, tan atípico que a mí me gusta. Por cierto el dibujo de Jim Lee me parece majestuoso.